Marcelo Díaz mira hacia atrás en plena cuarentena y recuerda sus primeros días en Racing.
Si hay un sentimiento que despertó el confinamiento total y obligatorio es la nostalgia. Cuando el futuro es incierto, se hace más sencillo mirar hacia atrás y recordar con melancolía los viejos momentos vividos, cuando cualquier preocupación era menos preocupante que el coronavirus y la pandemia. Algo así le pasó a una de las figuras de Racing en las últimas horas.
Marcelo Díaz se muestra muy activo en sus redes sociales. Es común que escriba posteos largos mientras dura el confinamiento y habitualmente suele dejar en su perfil de Instagram diferentes historias vinculadas a su carrera. Hace algunos días, el Chileno recordó las sensaciones de su debut en Racing.
“Siempre que estoy nervioso antes de un partido, recurro a la misma fórmula: ir jugada a jugada y no imaginarme nada más. Trato de concentrarme en cada detalle, de poner mi cabeza a funcionar al máximo y de resolver de la manera más fácil. Hacer sencillo lo sencillo es la consigna elemental. Recién una vez que me voy sintiendo más cómodo, que agarro confianza, me animo a arriesgar un poco más con la pelota.
Así me sentía antes de jugar mi primer partido como titular en Racing . Había debutado dos fechas antes en Tucumán. Pero el 24 de agosto de 2018, en Paraná y contra Patronato, se me presentó mi primera gran oportunidad en el club. Estaba expectante porque quería que las cosas resultaran de buena forma. Ganamos 3 a 0 y creo que logramos -y que logré- una actuación redonda. Tal vez, la mejor carta de presentación que podría haber tenido. A partir de ahí, pude empezar a mostrar que estaba a la altura de esta camiseta.
¡Lo que vino después es historia y todos lo sabemos!”