El ex arquero de la Academia contó intimidades del plantel 2011/2012.
Que Teófilo Gutiérrez tiene un carácter sumamente especial, y que su relación con el plantel de Racing no fue buena, es algo que es de conocimiento público. Ni los goles, ni sus grandes actuaciones, validaban para sus compañeros y el hincha, el comportamiento que tenía fuera del verde césped. Y dentro del campo también le ha costado caro a la institución, por las numerosas expulsiones que recibió, y las multas económicas que le aplicaban por sus graves errores de conductas. “El día que llegó, en la primera práctica de fútbol, quedó mano a mano conmigo, me eludió e hizo el gol. Se fue corriendo al banderín del córner, pegó un saltó y extendió el puño. Pensamos, ¿a éste qué le pasa? Después nos dimos cuenta que hacía todo para él”, comentó De Olivera, en diálogo con Racing de Alma.
Con respecto al polémico desenlace ocurrido en la cancha de los vecinos, el cual significaría el último encuentro para el colombiano con la camiseta de Racing, Dida afirmó que ese acontecimiento debería haber sucedido mucho tiempo antes: “El vestuario de Independiente debió suceder mucho antes. Contra Banfield, sinceramente pensé que se armaba el ring, que cobraba, pero no…”. “Tuvimos varias charlas para que cambiara su actitud, pero no le entraba una bala”, agregó el misionero.
Si hay algo que lo mantuvo en pie durante ese tiempo a Teo, fueron sus buenos desempeños y los goles importantes que marcó en las distintas competencias. Sin sacarle el mérito e intentando comprender su comportamiento, De Olivera comentó que si bien era un gran futbolista, en el vestuario dejaba mucho que desear. “Teo se portó mal siempre. Desde lo deportivo no se puede decir nada, pero era un pelotudo bárbaro“, cerró.
Acádemico, ¿qué recuerdo tenés de Teo con la camiseta de Racing?
