Sebastián Beccacece parece tener la idea principal de lo que será el equipo para enfrentar al rival de toda la vida.
De cara al partido del domingo, Sebastián Beccacece comenzó a elaborar un plan para poder obtener el triunfo y así comenzar una senda victoriosa que contagie ilusiones a sus jugadores y a los hinchas de cara a un 2020 que tiene importantes objetivos como la Copa Libertadores de América. Parece ser que la base del equipo para enfrentar a los vecinos, ya apareció en la cabeza del entrenador.
La práctica del jueves, en el Predio Tita, fue con fútbol táctico hasta mitad de cancha. Luego, continuó con tareas en el gimnasio. Diego Milito, el manager de la institución, dijo presente en el predio y se tomó un tiempo para dialogar con Sebastian Beccacece y con algunos jugadores, una vez concluido el ensayo.
Lo más sobresaliente de toda la mañana, fue que el entrenador paró un equipo para el ensayo táctico que realizó y en el caso de darse la lógica, seguramente sea el once, o por lo menos la base, que salga a disputar el clásico de Avellaneda el domingo por la tarde.
Beccacece paró a: Gabriel Arias; Iván Pillud, Nery Domínguez, Leonardo Sigali, Eugenio Mena; Walter Montoya, Leonel Miranda, Matías Rojas, Alexis Soto; Héctor Fértoli y Lisandro López.
De confirmarse este equipo, Racing sostendría en esquema táctico que utilizó el encuentro anterior ante Argentinos, aunque con algunos cambios, en principio muy interesantes, respecto del partido ante el Bicho. De movida, en el lateral derecho volvería a aparecer un especialista en el puesto como es Iván Pillud, adelantando a Montoya y quitándole de encima algunas tareas defensivas. Leonardo Sigali regresaría al equipo titular, luego de reaparecer en las canchas tras su período de inactividad. Matías Rojas se colocaría junto al Lolo Mirando en el centro del mediocampo, similar a la posición que tenía en Defensa y Justicia. Alexis Soto nuevamente jugaría como mediocampista por izquierda, adelante de Eugenio Mena. Héctor Fértoli acompañaría a Licha López, esta vez como delantero y no como extremo. Y finalmente, el capitán, que estaba en duda por una molestia, luciría la cinta en su brazo desde el arranque del encuentro.